Señores, ¡vayan por el plato fuerte!

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Decidí empezar mi primera entrada del 2011 con esta frase: "Algunas personas enfocan su vida de modo que viven con entremeses y guarniciones. El plato principal nunca lo conocen" (José Ortega y Gasset).

Hace unos días tomé una decisión importantísima en vida. Por supuesto, me entró terror y angustia, porque los cambios suelen producir esas sensaciones en nosotros los mortales, independientemente que estemos seguros de nuestros pasos.

Pero, amigos, debemos evitar a toda costa que nuestro espíritu se apague por el miedo a aventurarse y seguir adelante. Saben, esta es la segunda vez que dejo “los entremeses y guarniciones” por un lado y me lanzo por “el plato principal”.

Por supuesto, los entremeses y guarniciones te quitan el hambre y uno los puede disfrutar muchísimo, pero el plato principal, señores, nos hace dar un tremendo “Ahhh, qué delicioso”. Jamás estaremos satisfechos sin ese plato principal, jamás.

Hoy más que nunca, sé que en este nuevo viaje no estoy sola. Primero que nada, está mi Poder Superior, a quien yo llamo Dios, también está mi familia (la de sangre y la que yo he decido que sea mi familia: amigos y compañeros de trabajo). A todos ellos les debo mi seguridad, positivismo y entusiasmo en esta nueva etapa de mi vida.

Así pues, si usted ahora siente cosquillitas, algo así como “Yo también quiero ir por el plato fuerte”, prepárese, disfrute sus “guarniciones” y sienta el deseo firme de SER FELIZ, eso será suficiente para que disfrute o encuentre el camino perfecto que se llama “Felicidad y paz emocional”.

Nota especial: 

A todos mis amigos de mi antigua empresa, los quiero con el alma y deseo que todo sea positivo para ustedes, TODO. ¡Ánimo, no están solos en este bello viaje que es la vida!

¡Este es el mejor año de nuestras vidas!